La mañana se presentó gris en la Zona Oeste del conurbano, pero en el taller de Kary Vinilos en El Palomar el clima no condiciona el sonido monótono de las máquinas de corte. El laser pasea sobre el pvc a milímetros de la superficie colorida. La cuchilla, filosa, se abre camino y gira caprichosa para dejar curvas y letras en el cartel.

Karina extiende su mano y acerca un mate mientras Nicolás, desde la PC, revela un secreto: “Esta mesa también tiene vinilo. La iba a pintar, pero entonces se nos ocurrió un vinilo simil madera. Quedó muy bien”. La mano acaricia el escritorio para mostrar la firmeza del material, orgullosa.

Kary Vinilos es una empresa familiar que se dedica al diseño, corte y colocación de vinilos de todo tipo. Están los publicitarios, que señalan nombres, logos u ofertas. También hay decorativos como los que presentan tragos, paisajes o dibujos infantiles. Otros son operativos: un fondo difuso de hojas y árboles para que en la fotografía, al estar detrás y fuera de foco, simula un fondo natural en una la instantánea de un producto. “El mejor vinilo que hicimos fue para una productora de televisión. Fue un diseño personalizado que tenía que estar exacto. Necesitaban replicar un azulejo antiguo. Diseñamos, chequearon, corregimos y terminamos instalando todo el piso de un set de filmación en vinilo. En cámara eran azulejos antiguos, pero nosotros sabíamos que eran nuestros vinilos”, contaron, otra vez orgullosos.

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Karina Villalba y Nicolás Mecca lideran Kary Vinilos, la empresa que comenzaron juntos antes de la pandemia y que varios años después, y con mucho esfuerzo, hoy responde a trabajos en toda la Zona Oeste y la Ciudad de Buenos Aires. Incluso hace apenas unos días estuvieron colocando sus vinilos en el Estadio Monumental, la casa de River Plate.

El trabajo conlleva creatividad, responsabilidad y muy buena comunicación con el cliente. “Puede ser una familia que necesita vinilos para remodelar los muebles de su casa, un emprendedor que quiere hacer stickers de su marca, un comercio que necesita hacer la vidriera. Nos piden lo que necesitan, nosotros respondemos con los materiales que tenemos y con el catálogo de diseños. Tenemos miles de diseños, pero también puede ser personalizado”, explicó a Castelar Digital Karina Villalba. “Podemos hacer el logo o imagen que quiera. Después se diseña y se prepara para corte o impresión. Después las máquinas cortan o imprimen el vinilo. Después nosotros cortamos e instalamos. O lo entregamos al cliente si lo quiere instalar él”, resumió la especialista.

En formato de narración pareciera una línea de tiempo productiva, pero conlleva chequear diseños, correcciones, la preparación del material y la selección del vinilo correcto. Se trata de una fina lámina de pvc autoadhesiva muy flexible, resistente y duradera. En todos los colores, en brillo o mate, y hasta también en metálicos o translúcidos. Además, la experiencia. Nicolás y Karina llevan casi 10 años en la producción en instalación de vinilos. Todo lo aprendido se aprecia en el momento tras el corte de la máquina, cuando las manos trabajan el material para retirar el vinilo sobrante y lo disponen para pegar en cualquier superficie. “Siempre tiene que ser lisa y limpia. Es muy fácil de colocar, se utiliza una espátula que te ayuda a estirar el vinilo sin romperlo”, explica como si fuese simple, pero no lo es.

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Las máquinas siguen con su trajín, el sonido invade el ambiente y quien gana las miradas es el termo del mate que está completamente decorado con stickers de todo tipo. abundan los relacionados con la Selección Argentina, Messi y la Copa del Mundo, pero también hay animalitos y hasta los protagonistas de la serie Friends. “Podemos hacer stickers como también blackout o banners publicitarios. Letras y carteles para vidrio, para un comercio, como una pared de una cocina en una casa. El vinilo permite hacer de todo”, completaron.

“Empezamos con vinilos chiquitos: Etiquetas. Después seguimos con botellas: Agua, Leche. Seguimos con muebles: mesas, mesadas, alacenas, paredes. Hasta heladera hemos hecho. Después ya hicimos de todo: Publicidades, logos para emprendedores, pisos. Empezamos primero trabajando para amigos, para que conozcan lo que hacíamos, a ellos mismo que tienen emprendimientos, empezamos a armarle el logo, sacar fotos y empezamos por redes. Era todo Facebook, aún no estaba instagram. Todos los pedidos entraban por facebook. Ahora 9 años después podemos manejarnos desde otro lado. Comercios, casas, emprendedores. Hacemos de todo”, destacó Karina.

El mate continúa la charla, mientras las máquinas hacen una pausa para volver a encarar otro diseño. El cambio de material obliga a prestar atención y todos miramos, aprendemos, sobre rollos de pvc. Luego unas fotos y algunas tomas en video para complementar la nota. La pregunta final quizás tenga una respuesta obvia pero se dispara igual. La respuesta conforma: “Le pusimos Kary Vinilos porque buscamos un nombre que se pueda memorizar fácil. Yo me llamo Karina, tomamos Kary y le sumamos lo que hacemos. Buscábamos un nombre pegadizo, no algo que no te puedas acordar. Te acordas de mi nombre y lo que hacemos, lo que podemos hacer por tus ambientes”, finalizó la vecina.

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A Kary Vinilos lo podés encontrar en sus redes sociales y también en la Guía de Comercios de Castelar Digital.