Florencia Bonet Xicoy, pianista y docente de Ituzaingó, viene de participar en el ‘Ciclo de Pianistas´ organizado por el Bar Cultural `Bien Bohemio´, ubicado en Boedo, el pasado viernes 15 de septiembre. “Es un ciclo que se está haciendo desde marzo. En verdad, estaba planeado para antes de la pandemia. Se retomó este año y ya tocaron muchos músicos”, expresó la Profesora de Piano egresada del Conservatorio de Morón `Alberto Ginastera´.

En esta oportunidad, la artista se presentó sola junto a su piano. A lo largo de su carrera, ha trabajado con orquestas, con grupos de tango y también lo ha hecho de manera solista pero compartiendo escenario. “En general, siempre éramos un grupo de tres o cuatro mujeres que íbamos pasando de a una y cada cual tocaba su repertorio. En este caso, era hacerlo todo yo”, explicó y agregó: “No es muy común. Es todo un desafío, realmente, estar en el escenario sola con el instrumento y con el público (Risas). Estuvo lindo, fueron muchos conocidos y les gustó”.

“La lista fue bastante variada, en general todo tango y valses. Hice `Chiqué´ (de Luis Brignolo), `El Andariego´ (de Alfredo Gobbi), `Flor de Lino´ (de Homero Expósito), `Amores de Estudiantes´ (de Carlos Gardel), entre otros. Un poco de todo con arreglos de Carlos García, de (Héctor Luciano) Stamponi y alguno mío”.

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Florencia Bonet Xicoy comenzó a tomar clases de piano a los 8 años. En 2005 inició su actividad en el tango integrando diversas agrupaciones, estudió en la Academia Nacional del Tango y, también, con maestros como Juan Trepiana, Oscar De Lía y Nicolás Ledesma. En 2007 ingresó a la Orquesta del Conservatorio de Morón. También fue parte de la Orquesta típica del maestro Alberto Di Paulo y la Orquesta Escuela Emilio Balcarce, dirigida por Néstor Marconi, donde compartió escenario con grandes maestros del género como Leopoldo Federico. Participó en la final del Festival y Mundial de Tango 2010 junto al bandoneonista y director Osvaldo Piro y la cantante Susana Rinaldi. Ese mismo año, en el Festival Nacional de Tango de Junín, tocó junto a la Orquesta `Las del Abasto´ compartiendo escenario con el `Quinteto Real´ y la Orquesta del maestro Rodolfo Mederos.

En cuanto a la experiencia de tocar de manera solista relató: “La realidad es que me lo puse como parte de un proyecto personal y resultó a medias, sinceramente (Risas). Montar un repertorio de este estilo implica mucho esfuerzo y muchas horas de estudio y, tal vez, un año o dos para redondearlo. Además, la autogestión también es compleja, estar buscando lugares, completando fechas y demás. Estuvo interesante, pero mi idea para el año que viene es seguir haciendo esto pero acompañada de otra gente. Compartir escenario, sin tanta carga de estar una hora tocando yo sola”.

Actualmente, se encuentra dedicada a la enseñanza, tanto de forma particular como en instituciones. “Trabajo `full´ como docente en instituciones de nivel terciario. Estoy en el Conservatorio de Música de Morón, en la Escuela Municipal de Danzas `José Neglia´ y en la Escuela de Arte `Leopoldo Marechal´. Como estoy más abocada a lo que es docencia en el Estado, todo lo que es artístico la verdad, que este año, quedó bastante relegado”, reveló.

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Asimismo, dicta clases particulares de piano; pero, desde hace un tiempo, no está incorporando nuevos alumnos. “Continúo con mis alumnos de siempre, que tengo hace años. Tengo algunos que hace 10 años que están estudiando conmigo. Las clases son un mano a mano: el alumno y yo. Personalizadas, siempre al gusto y lo que requiera cada uno. Primero, porque cada alumno se acerca a tomar clases de instrumento por diferentes motivos. Dependiendo de esto, vamos trabajando el repertorio y lo único que hago es acompañarlos en ese recorrido de la música. No les impongo nada, ellos deciden qué quieren hacer, cuándo y aporto lo que pueda en función de sus necesidades y deseos. Es algo muy relajado a diferencia de estar trabajando en una institución donde hay que cumplir con un programa o una cátedra”, manifestó.

“No sumo más alumnos chiquitos, de cuatro o cinco años. A partir de adolescentes en adelante. Tengo de todo, desde adolescentes hasta un señor de 80 y pico, más o menos. Es muy variado, muy heterogéneo, cada uno viene por motivaciones personales y un deseo interno que no necesariamente es salir al escenario o mostrarse. Hay muchos que estudian tango y muchos otros que estudian música clásica. A veces eligen algo más actual, pero hay un poco de todo. En general es el repertorio académico de la música clásica mechado con un poco de contemporáneo, como puede ser, María Becerra, `Tini´(Stoessel) o Charly García”.

En este último tiempo, Florencia Bonet Xicoy ha estado pensando en un nuevo proyecto el cual incluiría otras disciplinas artísticas en sus futuras presentaciones. “Tengo ganas de hacer algo con otras áreas. En la Escuela de Danzas soy pianista acompañante y se me ocurrió hacer un repertorio de tango pero que esté incluida la danza u otras disciplinas artísticas, como la pintura. Me parece que puede ser súper enriquecedor para el público. Un lenguaje más completo, no solamente la música sino que esté pasando algo en el medio. Tengo que terminar de pensarlo pero va por ahí. Sería más para fin de año o para el año que viene”, concluyó.

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