A unos pocos metros de su dirección anterior, la Farmacia Granda comenzó una nueva etapa en su historia. Con más de seis décadas en el corazón de Castelar, el tradicional comercio de salud se trasladó a un local más amplio sobre Avenida Zeballos, donde continúa desarrollando su perfil magistral y naturista, fiel a la impronta que la caracteriza desde 1964.

“Estamos en la nueva farmacia hace tres meses, estamos muy bien, muy contentos. Fue un gran cambio en relación al tipo de farmacia que tenemos y a la propuesta que estamos muy interesados en llevar a cabo”, contó Gustavo Pusset, farmacéutico y actual responsable del establecimiento.

El cambio fue una decisión necesaria ante el crecimiento sostenido del servicio. “Si bien estábamos muy cómodos en el otro local, estábamos acotados en el crecimiento. Nosotros hacemos homeopatía, preparados naturales, fitoterapia, recetas magistrales, y eso conlleva un lugar físico. El local nos estaba quedando chico”, explicó Pusset. Con el nuevo espacio, el equipo pudo ampliar el laboratorio y mejorar la atención. “Conseguimos este nuevo local que está muy cerquita del anterior. Aquí realmente estamos seguros de que vamos a poder desarrollar todo lo que nos gusta y de una manera más cómoda, para nosotros y para nuestros clientes”.

#NotaRelacionada: Promo Soy Vecino: Merkat Campoy premia a sus clientes de cercanía con descuentos y regalos

El traslado no modificó el vínculo con la comunidad. “Seguimos en el barrio, nuestros pacientes de a poco nos vuelven a encontrar. Estamos en la vereda de enfrente, a unos escasos 70 metros”, señaló el farmacéutico, destacando la continuidad con el entorno que acompañó a la farmacia durante décadas.

La historia de Farmacia Granda se remonta a 1964, cuando Celso Granda abrió sus puertas en la misma avenida. “Empezó en la vereda de enfrente, ahí fue su primera casa. Su creador fue Celso Granda, siempre fue la farmacia del barrio. En los registros dice que es la tercera farmacia de Castelar. Los clientes se acercaban al mostrador y Celso les preparaba lo que necesitaban. Venían con alguna dolencia, con la receta, y hacía los preparados en el momento. Y yo mantengo ese perfil”, explicó Pusset.

Cordobés de origen, Gustavo Pusset lleva 18 años al frente del local, y encontró en Castelar el espacio ideal para continuar su proyecto profesional. “Mi proyecto de vida, hace 18 años, me trajo a Capital Federal. Soy cordobés pero tenía farmacia en Mar del Plata. Empecé a buscar dónde ejercer mi profesión y terminé en Castelar, porque encontré una farmacia que tenía el perfil que estaba buscando”, recordó.

#NotaRelacionada: El Castillo Ayerza: historia y legado del edificio más emblemático de Castelar Norte

Ese espíritu barrial fue lo que más lo atrajo. “Castelar me sorprendió muchísimo. Yo buscaba una farmacia social, de barrio. Granda había desarrollado mucho eso y el entorno tenía un vínculo muy grande. Los clientes cuentan que se pesaban en esa misma balanza cuando eran chicos, que la farmacia es donde se vacunaron de chiquitos. Me gustó ese ida y vuelta que se había creado con esa farmacia”.

La farmacia magistral, especialidad que distingue a Granda, combina la ciencia con la personalización del tratamiento. “Una farmacia magistral se caracteriza por preparar fórmulas específicas para la necesidad del paciente, recomendadas por un médico. Una fórmula magistral es una fórmula adaptada para cada paciente. Si bien dos personas pueden tener las mismas necesidades, los miligramos y las asociaciones no son las mismas”, explicó Pusset.

Durante la última ola de dengue, el equipo de Granda también elaboró repelentes bajo receta magistral. “La farmacia magistral se dedica a dar respuestas. Cuando el mercado o los laboratorios no las tienen, nosotros podemos brindarlas con el consejo y el acompañamiento”, resumió.

Desde su nueva ubicación, la Farmacia Granda continúa siendo un referente en salud natural y atención farmacéutica personalizada, manteniendo viva una tradición que forma parte de la identidad de Castelar.

Mirá el video de esta nota en este REEL.