Juntos desde la infancia, tras juegos y amistad, y en un autocine como escenario, nació el amor y nunca se separaron. Más de 30 años después contaron la historia y fueron elegidos por sus vecinos. Ganaron una cena romántica y son los elegidos por el Día de los Enamorados.

El Centro Comercial e Industrial de Castelar es la organización que agrupa a los comerciantes de la Ciudad de Castelar. Habitualmente brinda cursos, capacitaciones y beneficios a sus socios, pero para el 14 de Febrero, Día de los enamorados, sorprendió con un concurso inédito: encontrar la mejor historia de amor de la ciudad. Para dar con ella se invitó a los vecinos de Castelar a contar su historia romántica y así elegir a la más empática.

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El Centro Comercial recibió cientos de cartas y mensajes relatando historias de amor. La Comisión Directiva fue la encargada de la pre selección. Sólo cuatro historias llegaron a la final y pudieron ser conocidas por todo los vecinos (Ver: Concurso inédito: Elegí la mejor historia de amor de Castelar). Se convocó para que por redes sociales se vote la mejor historia y fue así cómo la enviada por Flor se alzó con la mayor cantidad de votos.

El premio es una cena romántica en Gardenias en su sucursal de Carlos Casares y Pompeya. La historia fue enviada por María Florencia Carrillo, recordada Maestra Jardinera del Colegio Inmaculada, con 36 años junto a su marido con quien tuvo cuatro hijos y un nieto.  

La historia romántica ganadora:

Había una vez dos señoras que se hicieron muy amigas.
Una tenía una hijita de tres años. La otra, uno de ocho.
Los dos nenes fueron creciendo sin compartir demasiadas cosas, porque la diferencia de edad hacía que tuvieran distintos gustos.
Pero el tiempo pasó y, casi sin darse cuenta, empezaron a mirarse de otra manera.
Un día, él la invitó a ir al autocine, con la excusa de que ella nunca había ido.
Esta vez no era en grupo como siempre; sólo los dos.
Al llevarla a la casa, le dio un beso y le preguntó si quería ser su novia.
Ella sintió que el auto se transformaba en carroza y su amigo, en príncipe.
Dos años después de casaron.
Hace cuarenta años empezó esta historia, pero ese beso no se olvida.
 Y colorín colorado, este cuento, sí; pero el amor no se ha terminado