“Cuando era un chiquilín, mi pueblo era un lugar de casas con jardín y cercos de verdad; había mucha luz brillando alrededor y era un milagro azul el paraíso en flor. Y había un boulevard, con árbol y farol, y calles para andar a pleno sol”, comienza la letra de Canción para Haedo, que lleva la firma del vecino Carlos Barocela y describe el pueblo en el que vivió, que transitó y que llevó siempre en su corazón. Muchas otras de sus canciones están dedicadas a otro pueblo, distante, pero que también fue su lugar en el mundo: Villa Gesell.

Carlos Barocela nació en Haedo en diciembre de 1939. Apenas 10 años después conoció las playas de Gesell y desde entonces no se despegó del mar. Dedicó su vida al arte y a los dos pueblos que amó. Terminó sus estudios secundarios en el Colegio Nacional de Morón, conocido en la actualidad como Manuel Dorrego. Fue profesor de guitarra durante más de 50 años, compartiendo su pasión con muchos vecinos de la Zona Oeste.

Se dedicó a la música y editó 8 discos: Carlos Barocela (1968), Amigo (1969), El Poeta (1971), Con A de Anzoátegui, con B de Barocela (1975), Viajero Inmóvil (1981), Alma de Papel (1982), Línea Joven (1982), Tu nombre en la Arena (1989) y Recuérdame (1996).

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Su canción más popular fue Tu nombre en la arena que, como la mayoría de su obra, está colmada de imágenes de playa, de cielos inmensos colmados de estrellas, de amor y amistad.

También brindó su arte a la poesía y editó dos libros: Estaciones de un Paisaje y El tiempo fiel.

En 2011 el Honorable Concejo Deliberante de Morón lo reconoció como Ciudadano Ilustre por su trayectoria y por el reconocimiento de sus vecinos.

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El pasado 1 de octubre Carlos Barocela falleció a los 83 años. Todos sus amigos de Haedo y de Villa Gesell lo recordaron con amor, en redes sociales se repitieron historias, encuentros en los cafés y bares cercanos al mar como charlas en las plazas de su ciudad natal. Su legado fueron canciones, poemas y amistad.